Desde hoy, la bandera europea que sobresale en el balcón del ayuntamiento de Navalmoral quedará a media asta en señal de protesta contra el acuerdo firmado entre la UE y el gobierno Turco por el que se permite expulsar a las personas qué, huyendo de la crueldad de la guerra que asola a sus países, arriben en costas griegas.
Antes de proceder al descenso del pendón, en la Plaza de España, la concejala de Políticas Sociales, Techi García, ha dado lectura a un manifiesto que instaba al gobierno español a reconsiderar el apoyo al acuerdo y a habilitar los mecanismos necesarios para dotar de ayuda humanitaria a los refugiados y refugiadas asolados por la cruel guerra que están viviendo sus países.
MANIFIESTO.
El Ayuntamiento de Navalmoral considera inmoral el acuerdo UE-Turquía. Entendemos que es ilegal y vulnera la Carta Internacional de los Derechos Humanos, el artículo 19 de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE y la Convención de Ginebra para los Refugiados.
Denunciamos que la UE trata a los refugiados y refugiadas como moneda de cambio con el Gobierno de Turquía y señalamos que con este acuerdo el proyecto de construcción europea muestra de nuevo su deterioro trasladando la crisis de los refugiados fuera de sus fronteras, abandonando los valores y los principios que configuran Europa como un espacio común de libertad, seguridad y justicia, fundada sobre los valores de la dignidad humana, la libertad, la igualdad y la solidaridad a los que se refiere el Preámbulo de la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea.
La UE, además de incumplir la legalidad internacional, elude su responsabilidad de dar respuesta a los miles de personas refugiadas que se agolpan en su territorio y en sus fronteras mediante un acuerdo con Turquía para deportar a ese país a todos los inmigrantes y demandantes de asilo que lleguen a la UE a través de este país, a cambio de que los Estados miembros reasienten al mismo número de refugiadas y refugiados asentados en territorio turco.
El acuerdo con Turquía, además, permite las devoluciones sumarias en caliente. Un acuerdo que se suma a múltiples decisiones que han ido minando los valores fundacionales de la Unión
La UE pagará por las devoluciones a Turquía 3.000 millones de euros y 3.000 millones más adicionales en 2018, sin ningún aparente mecanismo de control del destino del presupuesto. Además eliminará el requisito de visado para los ciudadanos turcos en Europa a partir de junio de 2016 y agilizará la entrada de Turquía a la UE, obviando que el Gobierno de Erdogan se aleja alarmantemente de las prácticas democráticas, violando sistemáticamente los derechos humanos.
El Ayuntamiento de Navalmoral incide en que esta medida no resuelve ningún problema, sino que, al contrario, provocará la apertura de otras vías más peligrosas y costosas para las personas refugiadas devueltas que pretendan llegar a países de la Unión Europea o bien el confinamiento de otros muchos en campamentos inhumanos sin ninguna perspectiva de futuro.
Las personas refugiadas son seres humanos que huyen de la guerra y buscan la protección internacional. Hacer de ellos una mercancía para el intercambio económico es inhumano y no dará lugar a una respuesta más humanitaria: pagar a Turquía no eliminará el peligro al que el pueblo sirio, iraquí y otros están expuestos en sus propios países.
Según nuestro criterio la UE no debería mantener a las personas refugiadas en campamentos inhumanos sin ninguna perspectiva, y no debería haber ningún intercambio que mantenga a los refugiados y refugiadas fuera de la Unión Europea y la aceleración de las negociaciones de adhesión de Turquía.
Asimismo, se lleva mucho tiempo defendiendo que la comunidad internacional debería invertir tiempo y recursos para restablecer la paz en Oriente Medio, y los Estados miembros de la UE deberían trabajar en la puesta en marcha de vías legales y seguras para que las personas refugiadas no tengan que arriesgar sus vidas para obtener protección.
Desde el Ayuntamiento de Navalmoral manifestamos nuestro más absoluto rechazo a la gestión de la UE y de sus Estados miembros de la crisis humanitaria de los refugiados y refugiadas en Europa y consideramos que ésta Europa tiene capacidad de respuesta, pero no voluntad política.
En consecuencia, el Gobierno español debe instar a la reconsideración del principio de acuerdo con Turquía con la mayor premura posible y habilitar los mecanismos necesarios para dotar de ayuda humanitaria a los refugiados y refugiadas asolados por la cruel guerra que están viviendo sus países.
La ratificación de este acuerdo podría hacernos caminar peligrosamente hacia la erradicación del Derecho de Asilo y la Protección Internacional dentro de la Unión Europea, poniendo en cuestión los pilares básicos de su propia configuración.
Por tal motivo denunciamos y reclamamos que, en cumplimiento de la legalidad internacional, no se ratifique el pacto avanzado hasta el momento y se abran vías de acceso seguras para todas aquellas refugiadas y aquellos refugiados que, de acuerdo con la ley, tienen derecho a que se les reconozca esta condición dentro de la Unión Europea.
Ayer, 20 de Marzo de 2016 entró en vigor este bochornoso e inmoral tratado y se cobró la vida de dos menores. Hoy bajamos a media asta la bandera europea de nuestro ayuntamiento, porque hoy Europa está de luto.